domingo, 14 de septiembre de 2008

El Cante de las Minas

Probablemente las mejores actuaciones que haya visto en la vida.
Es muy probable también que no sean las últimas y que repetiremos el Cante de las Minas otros años. Pero no cabe duda que esta edición 48 del Festival ha hecho evolucionar mi forma de comprender, y sobre todo de sentir, el flamenco.


Un pensamiento especial mientras preparo esta selección de fotos para Miguel Poveda cuya actuación aquella noche me delumbró con su belleza, su perfección emocional, su justa ejecución, en una palabara con su jondura.
Es él en las dos primeras fotos. La primera por Alegrías, la segunda no me acuerdo en qué momento, pero a todos se nos pusieron los pelos de punta, eso seguro.





El Manolete, rodeado de sus palmeros-cantaores.




A continuación el Lebrijano que con sus
ochenta y tantos años, a pesar de problemas
salud aparentemente graves, nos dio aquella
noche una magnífica actuación con extractos
de su nuevo disco (aquel con las letras de
G. García Márquez) y otras joyas que sólo
se encuentran en su voz. Era la primera vez
que lo veía y me dio mucha impresión ver a
tan grande maestro.





Aquí el Nano de Jerez con su acompañante. Un flamenco diferente que rompió bastante con el tema minero. Los aficionados a Pencho Cros no vieron mucha relación entre las mineras que cantaba el hijo predilecto de la Unión y la gracia gaditana del Nano. Son dos flamencos muy diferentes, la verdad. A mi, me encantó este aire, este duende, este gaditanismo del Nano de Jerez de la Frontera que es la cuna de la bulería. El Nano cantó una extraordinaria aquella noche.




Manuel Cuevas y su acompañante. Una actuación emocionante con un par de Fandangos muy bonitos al final. Un cante profundo y muy emocionante.



Abajo, el guitarrista de Rafaela Carrasco

1 comentario:

guapeta dijo...

Tes photos sont magnifiques et nous donnent envie de venir en Espagne, d'aller assister à un festival de flamenco comme celui-là.Muchos besos